"El único sentido imprescindible es el sentido del humor".
Desde luego, si pierdes cualquiera de los otros, es importante que conserves ése. Hay quien incluso lo ha conservado hasta perder todos los demás, dejando epitafios en sus tumbas que son auténticas perlas. He aquí unos ejemplos:
"Sólo le pido a Dios que tenga piedad con el alma de este ateo." (Miguel de Unamuno)
"Si no viví más, fue porque no me dio tiempo." (Marqués de Sade)
"Estoy aquí en el último escalón de mi vida." (Marlene Dietrich)
"La verdad, no me parece nada del otro mundo."
"No sé qué hago aquí." (Fernando Lleras de la Fuente)
"Aquí te espero."
"Perdonen por mi polvo."(Dorothy Parker)
"Aquí se está fenomenal."
"Buen esposo, buen padre, mal electricista casero."
O como este señor:
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